martes, 3 de junio de 2008

La Doña Bruja de Masaya


Ya hacía un ratito que me seguían... al principio disimulaban, se escodían entre los coches y guardaban las distancias. Pero, poco a poco, podía oir más claramente sus cuchicheos y risitas apagadas, hasta que acabaron caminando a mi lado.

Al llegar al parque de San Jerónimo se lo puse fácil, me senté en un banquito y esperé a que se acercaran.
Fue la más pequeña quien dio el primer paso. Tapándose su boquita mellada con las manos y sin poder reprimir la risa se sentó a mi lado.

- Y usted Doña... como se llama?
- Cinta y tu?
- Catarina... pero su nombre es de una virgencita?
- Si, una virgencita, pero está muy lejos

Raúl y Elena, sus compañeros de aventuras, se vienen finalmente.
- Y se perdió, Doña? Las artesanías no están por aquí...
- Ya lo sé, pero me gusta perderme


- Oiga Doña, y que le pasó en el cuello?
- Estaba malita, me operaron y tengo una cicatriz que no le puede dar el sol
- Le querían cambiar la cabeza?

- No... porque?

- A la "China" le cambiaron la cabeza... y ahora es una bruja
- Pero, ella no puede ser una bruja, es una Doña, parece buena...
- Y lo mismo su cabeza no es suya...

- Y lo mismo es una Doña pero bruja

- Qué es una Doña Bruja?
- Doña es bueno y bruja es malo... yo creo que una Doña Bruja no es ni buena ni mala, pero no lo sabemos... usted lo sabe Doña?

- No... nunca he conocido una Doña Bruja... o si?

5 comentarios:

idoia Ruiz Orrio dijo...

Yo creo que sí, que has conocido a más de una Doña Bruja, a más de una Doña, a más de una Bruja, a más de un Don y a más de un Brujo, y sobretodo a más de un Capullo (bueno tú... y yo). Qué fuerte regateando a taxistas Cinta... con lo que tu eres. Me encantan las caritas de los niños, venían del cole, no?? Y la historia de la cabeza, yo la próxima vez les diría que sí, que te han cambiado la cabeza, que en realidad tenías la cara de Gisele Bündchen... joder, puestos a inventar...
por aquí lo de siempre. los helados creo que se están empezando a derretir y no vamos a pillar ninguno.
besos y cuídate

Anónimo dijo...

Que bona. Quina conversa més surrealista. M'encanta. Potser sí que et van canviar el cap durant l'operació i encara no te n'has adonat. Potser has anat a Nicaragua en busca de la cabeza perdida... Per cert, crec que hauries d'anar buscant gelats més grans, perquè els minimilks estan prohibits a la nostra edat. Petons!

Anónimo dijo...

Jajajajajajajajaja...pero que bueno!!!Yo creo que esos niños te acabarán robando el corazón y que al volver ya no volverás a ser la misma (algo me huelo). Ahora, lo de cambiarte la cabeza se merece un premio! Y no se pueden cambiar también por aquí? A más de uno le haría un favor!
Los minimilks molaban cuando éramos pequeñas, pero ahora mejor los Magnums, o los Häagen Dazs, no?
Suerte!!
PD: Anoche vi un documental de Nicaragua muy interesante, la verdad.

Subcomandante Cinta dijo...

Pues de momento me quedo con los minimilk. En algún momento del proceso, antes de llegar a Magnums, se estropean... será el calor... o el recuerdo los Frigo...

The Father Of dijo...

Bueno Doña...¿te cambiaron la cabeza o què?...no ..si ya notaba yo algo raro...la otra te la dejarian en Bellvitge. La historia de los niños, de lo mejor que he leido, y muy original. Por cierto, los niños se ven muy aseaditos, no?. Tampoco la pobreza está reñiada con la limpieza...
¡Cuídate¡