martes, 8 de marzo de 2011

Y como se reconstruye todo esto?

Sin darme cuenta ya ha pasado un mes y medio de mi llegada a Haiti. El 16 de enero, días después del primer aniversario del terremoto que devasto Port-au-Prince (PaP) y sus alrededores, llegaba al país, coincidencias de la vida, en el mismo avión que el ex-dictador Baby Doc. Llegada prometedora con un aeropuerto totalmente colapsado por periodistas y seguidores. Durante este mes y medio he tenido ocasión de ver como la inestabilidad política puede afectar el futuro de un país. Un año después del terremoto, el país sigue por los suelos, no es que estuviera mucho mejor antes del 12 de enero de 2010 pero en este año; decisiones importantes que se deberían haber tomado han estado relegadas a un segundo plano. Mientras cerca de 800.000 personas viven todavía en tiendas de campaña y lo que les queda...

La vida en los campos de desplazados de PaP es muy diferente de la de los campos de refugiados y desplazados en Chad. Para empezar aquí se trata de un entorno urbano y peri-urbano, con espacios reducidos y grandes aglomeraciones de gente. Horas después del terremoto la gente que había perdido sus casas y que tenían miedo de dormir a cubierto por temor a nuevas replicas invadieron los espacios abiertos: desde un selecto club de golf hasta huertos urbanos, pasando por campos de fútbol, escuelas y terrenos particulares. Poco a poco la ayuda de fue organizando entorno a estos campos improvisados y hoy dia te encuentras con autenticad ciudades dentro de la ciudad.

La situación en otras zonas de la ciudad no es mucho mejor: no hay sistema de gestión de basuras, así que los desechos se acumulan por cualquier lado formando autenticas montañas. Con un poco de suerte alguien decide quemar un poco de basuras, de lo contrario la montaña sigue creciendo al lado de mercados, casas, riachuelos donde los animales comen restos de basuras y en los que los niños chapotean.

No hay servicio de salud publico, la educación es privada, en la ciudad el agua se distribuye en camiones, en las zonas rurales con un poco de suerte encuentras pozos, muchos de ellos contaminados por excrementos animales...

La verdad es que es un panorama un poco desalentador. El trabajo que hacemos las ONG naturalmente ayuda a mejorar la situación, pero no se trata de algo puntual. Las ONG no vamos a estar aquí para siempre, los donantes se acabaran cansando de Haití y el publico se conmocionara mas con las imágenes de la próxima crisis humanitaria. Es necesaria la implantación de una estructura que funcione en condiciones, con personal preparado y dedicado a tareas concretas. Y aquí es donde entra el juego en gobierno, poco preparado, centralista, corrupto y bajo la influencia de las 25 familias que, según las malas lenguas, controlan el país. El proceso electoral ha centrado la vida política en los últimos seis meses. Mientras 800.000 personas vivían en tiendas y cerca de 4.000 morían en todo el país a causa del cólera, el debate político se centraba en las elecciones del 28 de noviembre. La segunda ronda presidencial se espera para el 20 de marzo, esperemos que a partir de entonces el nuevo presidente o presidenta trabaje duro por sacar el país adelante, un país que podría ser un paraíso, pero que de momento se asemeja a un basurero gigante.

Seguiremos informando...



5 comentarios:

idoia Ruiz Orrio dijo...

ya era hora!!! seguiremos leyéndote!

Anónimo dijo...

Salir de guatemala para encontrar guatepeor... you write so well and i look forward to reading your Haiti insights.

Ricitos dijo...

Sin palabras Cinta. Un abrazo

Anónimo dijo...

Sam soy yo!!

Nadia

Bartolomé Pluma Marianas dijo...

¡Menos mal!..Ha vuelto la periodista/guerrillera...ya se esperaba. Pensaba que o bien en Chad tenía mucho tiempo para escribir o en Haití estaba muy ocupada. Además tu entrada coincide con el Dia de la Mujer.¡Ánimos i Cuídate!